
Las casualidades y las coincidencias existen. Y, a veces, dan pie a historias insólitas dignas de chascarrillos. Cuál es el colmo de un atracador. La respuesta está en el suceso que tuvo lugar en el centro de Sevilla el pasado día 5 de agosto, de madrugada. Las empleadas de una heladería reconocieron, mientras esperaban a ser atendidas en las Urgencias del Hospital Virgen Macarena, al hombre que minutos antes les había amenazado en un intento de robo en su establecimiento.
Increíble pero cierto. Las tres muchachas fueron trasladadas en ambulancia al centro hospitalario para ser atendidas del ataque de ansiedad que sufrían después de que el presunto atracador, Rafael R.R., amenazara a las empleadas del establecimiento, cuyo nombre no quiso desvelar ayer la Policía por respeto a las víctimas.
Espeluznante situación para las jóvenes: estar esperando en la sala de Urgencias y, de repente, ver al atracador es una situación propicia al infarto. Cualquier médico podría haber pensado que las pacientes estaban delirando, reviviendo la experiencia o soñando. Pero no fue así. No eran secuelas del atraco. Lo que las chicas estaban viendo era cierto y aún no habían olvidado el rostro del atracador.
El agresor se encontraba en el ala de Urgencias esperando a ser atendido, al parecer, aquejado de un dolor en la pierna, según explicaron fuentes policiales. Las chicas trataron de actuar con calma y avisaron inmediatamente a los vigilantes de seguridad del hospital que lo retuvieron hasta que llegó la Policía Nacional, que lo arrestó tras ser atendido por los médicos.
0 comentarios:
Publicar un comentario